Os presento mi forma preferida de comer judías blancas, Borsch.
Tradicionalmente es una sopa rusa de remolacha que se hace con caldo de carne y suele levar patata, mostaza y algún que otro ingrediente que esta versión no tiene.
Os aseguro que esta receta es tan increíblemente rica y suculenta que pensaréis en ella cada vez que sintáis el frío invernal, deseando llegar a casa y poder disfrutar de una buena ración.
Yo compré brezel de cereales y semillas para disfrutar a tope ya que ese caldo es delicioso y merecía poder mojar pan en él.
Ingredientes : 3-4 raciones
- 2 puerros
- 2 ajos
- 2 zanahorias
- 2 remolachas (1 si es muy grande)
- 1/4 col morada
- 450gr. de judías blancas (escurridas)
- Caldo vegetal
- 1 cucharada de tomate frito
- Hierbas provenzales
- Sal
- Pimienta
- Aceite de oliva virgen extra
En primer lugar preparamos el caldo de verduras, el mío llevaba 1 zanahoria, 1 cebolla, 1 tomate,1 rama de Kale (col rizada) y 2 tallos de apio. También puedes comprar un caldo vegetal o utilizar agua pero te recomiendo 100% que hagas tu propio caldo (siempre quedará mejor).
Las judías puedes cocerlas solas dejandolas en remojo la noche anterior o puedes utilizar un bote de judías ya cocidas (a mí me encantan las legumbres cocidas de «ecocelera», sólo llevan las judías, agua y sal y además son una gran ayuda en la cocina, yo utilizo siempre sus grabanzos para los hummus, sus lentejas para una ensalada, etc…..)
Una vez listo el caldo empezamos con el plato en cuestión.
En una cacerola ponemos a calentar 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra y añadimos los puerros y el ajo bien picaditos, dejamos que se sofría un par de minutos y añadimos las zanahorias peladas y cortadas en finas rodajas, a continuación las remolachas peladas y troceadas en daditos pequeños y la cucharada de tomate frito.
Es el momento de espolvorear con hierbas provenzales, sal y pimienta recién molida.
El fuego debe estar a temperatura media y así lo dejamos unos 10 minutos con un cacito de caldo vegetal, si vemos que se queda seco volvemos a añadir otro poco.
Una vez transcurridos los 10 minutos añadimos las judías blancas ya cocidas (bien enjuagadas si son de bote) y la col que habremos cortado en tiritas, removemos bien para que se fusionen todos los ingredientes y vertemos nuestro caldo vegetal hasta que cubra (luego si lo deseas puedes añadir más), es mejor que no tenga un exceso de líquido.
Una vez que arranque a hervir dejamos 20 minutos a fuego lento y estará listo para disfrutar.
Éxito seguro, ya lo veréis.